lunes, 5 de noviembre de 2012

En homenaje a Pablo Vergara y Aracely Romo: Hasta vencer o morir.



Carta de Luisa y Manuel en un nuevo aniversario del crimen de Pablo y Aracely en manos de la dictadura chilena.

 Estimadas y estimados amigos y compañeros:
Nos dirigimos a ustedes desde nuestro corazón herido tantas veces por la violenta muerte de nuestros amados hijos y de todos los hijos e hijas que han seguido entregando su cuerpo y su sangre por todos nosotros hombres y mujeres, jóvenes y viejos que continuamos por el sendero de la lucha liberadora. Pero también nos atrevemos a llegar hasta ustedes desde la vida que nace y renace con una fuerza incontenible en toda la naturaleza y en todos los seres vivos que habitamos esta amada Pacha Mama, herida también tantas veces por la estupidez humana, pero que generosamente se entrega para que la vida continúe…
¿Por qué este preámbulo? Porque, a pesar de la tristeza que nos embarga por la cercanía del día “5 de noviembre” fecha en que aparecen muertos Pablo Vergara y Aracely Romo en el cerro Mariposas de Temuco cuando terminaba el año 1988, hijos de nosotros y de todo el pueblo consciente, luchador y subversivo… y a pesar del dolor que estremeció nuestro corazón por la caída de tantos otros compañeros en ese período oscuro, más oscuro que la dictadura porque tomó el disfraz de “democracia” para engañar hasta el ahora a muchos…
¡hay! Luis Alberto Silva, Normita Vergara, Mario Vásquez, Claudia López, Daniel Menco, Alex Lemun, Matías Catrileo, Manuel Gutiérrez… y otros hermosos y valientes compañeros que cayeron mostrándonos el camino correcto, el camino de la lucha… Y he aquí lo maravilloso… la vida continúa, nace y renace… Y en nuestro hogar, en nuestra vejez ha aparecido una hermosa luz, fruto del amor de Ana y Rony ha nacido ALEN AMANDA, un retoñito tierno y frágil de apenas 50 cms y 3,200 Kg.
Es apenas un montoncito, pero con la fuerza fantástica de la vida que brota, que sigue por todas partes como otros retoñitos que han llenado de paz nuestro corazón, ALEN EMILIO, AIN ALEN, MAURO, FANIA, JULIAN, a quienes enviamos nuestras bendiciones. Queremos invitarlos a estar con nosotros, con esta disposición, la llegada de este nuevo aniversario de la partida de PABLO y ARACELY, dos luchadores, amantes de la vida, y la irrupción en nuestras vidas de ALEN AMANDA, que nos llena de esperanzas y nos da fuerzas para “seguir viviendo, comiendo, venciendo la apatía, la flojera mental, el cansancio del corazón, para seguir luchando junto a ustedes”. 
Un abrazo cálido y fuerte para todas y todos. Luisa Toledo y Manuel Vergara Padres de Rafael, Eduardo y Pablo Vergara Toledo Caídos en la lucha por la liberación de los pobres.
 Villa Francia, noviembre 2012. 



domingo, 4 de noviembre de 2012

Son todos narcos y de los malos...


El tráfico de drogas de la CIA y sus vínculos con Chile

(Extraído de Panoramasnew.cl medio al cual entregamos todo nuestro apoyo)
El completo silencio mediático sobre las denuncias del ex inspector Fernando Ulloa, que implican a Hinzpeter en el encubrimiento de una red de narcotráfico protegida por miembros de la PDI, Carabineros y “soldados”, despierta sospechas que apuntan a una operación mayor.

Recordemos que según la denuncia de Ulloa, cerca de 300 kilos mensuales de cocaína ingresaban a través del paso de Colina, escoltados por funcionarios de su propia institución.
En correos enviados al director general Marcos Vásquez, Ulloa acusa un abandono por parte del Alto Mando de Investigaciones, el cual ignoró su denuncia y obstaculizó, bajo presiones y amenazas, el curso de la investigación que llevaba en ese entonces el fiscal Patricio Rosas de Maipú.
Los antecedentes que siguen a continuación podrían esclarecer muchas interrogantes sobre la verdadera dimensión de lo denunciado. ¿Es posible que la CIA o algún organismo de seguridad extranjero esté implicado en el tráfico de drogas, y de ser así, con qué finalidad? ¿Qué nos dice la historia sobre algunas operaciones de la CIA ligadas al narcotráfico?
El escándalo del Irán-Contras
En la década de 1980, para asegurar su elección presidencial, el equipo republicano de Ronald Reagan negoció con terroristas iraníes la liberación de 52 rehenes estadounidenses, secuestrados por grupos islámicos extremistas. El acuerdo quedó estipulado: Irán soltaría a los rehenes después de las elecciones, a cambio de que Estados Unidos vendiera armas al régimen. Con ello, la imagen pública del contendor demócrata Jimmy Carter se vería gravemente dañada, dando una victoria segura a Reagan.
Se constituyó así un consorcio internacional de privados denominado “La Empresa”, dirigido a la cabeza por el coronel Oliver North del Consejo Nacional de Seguridad de Estados Unidos y contando con la participación de traficantes de armas de peso internacional, como Adnan Khashoggi y Monzer Al Kassar.
Rápidamente comenzaron a surgir otras operaciones a cargo de la corporación: bajo el alero de la CIA, EE.UU. comenzó a armar a los Contras, una guerrilla centroamericana, con el fin de derrocar al gobierno sandinista de Nicaragua. Aunque los Contras cometieron horrendos crímenes contra inocentes, el presidente Reagan describió su misión como una “lucha libertaria”.
Tras conocerse el vasto conjunto de operaciones encubiertas de la CIA en Centroamérica, y sus vínculos con la venta de armas a Irán, el Congreso estadounidense conformó un Comité Especial bipartidista que exploró el caso en detalle, citando a declarar a gran parte de sus involucrados. Se dejó entrever en los medios de comunicación que las actividades de North iban mucho más allá de la venta de armas, sacando a relucir una pieza esencial en el financiamiento de las operaciones: el tráfico de drogas.
En su libro Compromised: Clinton, Bush and the CIA, el ex agente Terry Reed cuenta cómo un narcotraficante llamado Barry Seal lo contrató para enseñar a los Contras a pilotar aviones en el estado de Mena, Arkansas. Con la ayuda de Oliver North, Seal montó una operación para llevar armas a la resistencia nicaragüense y traficar toneladas de cocaína de regreso a EEUU, en el mismo período en que Bill Clinton era gobernador de Arkansas.
La operación fue descubierta cuando el avión C-123 de Seal, denominado “The Fat Lady”, se estrelló cerca de Nicaragua con cientos de armas para los Contras.
Pese a que el Congreso estadounidense no exploró la arista de las drogas en el primer comité conjunto de 1987, las gestiones del senador demócrata John Kerry descubrirían más tarde, en una investigación llevada a cabo en 1991, las conexiones entre “La Empresa” de Oliver North y el Banco de Crédito y Comercio Internacional (BCCI), cuyas cuentas fueron utilizadas por la CIA y numerosas agencias de inteligencia para canalizar los fondos de sus operaciones encubiertas, entre ellas el tráfico de narcóticos.
Baramdyka y el narcotráfico pinochetista
Por cosas del destino, un colaborador de la CIA y ex marine norteamericano llamado Iván Baramdyka, escapó a Chile en 1985, luego de que autoridades estadounidenses descubrieran sus vínculos con el Cartel de Cali. Según su confesión al periodista Francisco Martorell en 1993, Baramdyka ayudó a Barry Seal a traficar armas para los Contras.
Como señala la investigación de los periodistas Rodrigo de Castro y Juan Gasparin, inserta en el libro La delgada línea blanca, apenas Baramdyka pisó suelo chileno fue contactado rápidamente por el jefe de la CNI, Álvaro Corbalan, para que prestara asistencia al régimen militar en una amplia red de narcotráfico que involucraba – nada más ni nada menos – al primo de Monzer Al Kassar, el empresario chileno Yamal Edgardo Bathich.
En su entrevista con el Periodista, realizada en marzo de 1993, Baramdyka explicó tales operaciones con las siguientes palabras:
“Usted carga un avión 727-200 en Santiago de Chile, con armas o partes de ellas y cuyo destino es Bagdad, por ejemplo. La nave, por la distancia, debe parar al menos dos veces para reabastecerse de combustible y una parada, por ejemplo, puede ser en las Islas Canarias donde, luego de pagarle a alguien, se bajan dos, tres, cuatro o cinco cajas, sin pasar por la aduana, porque el avión está de paso, con cocaína”.
Con respecto a Bathich, el ex marine norteamericano explica, en referencia a un supuesto tráfico aéreo de narcóticos desde el exterior: “En un fundo de 50 mil hectáreas no se da cuenta lo que cae. Las tierras de Bathich en San Vicente de Tagua Tagua eran el lugar perfecto para procesar, empacar o hacer cualquier cosa”.
Las graves denuncias contenidas en La delgada línea blanca nunca han sido desmentidas. No obstante en 2006, algunos actores mencionados en la vasta red de Baramdyka debieron salir a dar explicaciones, una vez que las acusaciones emanaron, sorpresivamente, de un conocido colaborador del régimen militar: el ex jefe de la DINA, Manuel “Mamo” Contreras.
En un informe entregado al ministro Claudio Pavez, encargado de investigar la muerte del coronel Gerardo Huber, Contreras asegura que gran parte de la fortuna amasada por Pinochet provino del tráfico de drogas. En los ilícitos implicó al hijo del general, Marco Antonio Pinochet, y al empresario de origen sirio, Edgardo Bathich.
En el documento que fue filtrado a la prensa, el torturador de Punta Peuco explicó que el fallecido coronel de la DINA, Gerardo Huber, había tenido conocimiento de los narco-negocios de la familia Pinochet y deseaba dar a conocer esta situación a la opinión pública antes de ser asesinado.
Cabe agregar que el mismo coronel de la DINA habría tratado de contactar al periodista británico Jonathan Movie para proporcionarle información sobre las operaciones de tráfico de armas a Croacia y otros países, coordinadas por FAMAE, poco antes de que éste fuera encontrado muerto en la habitación 1406 del Hotel Carrera mientras se desarrollaba la FIDAE, en marzo de 1990.
El movimiento de cocaína nunca se detuvo
Claramente, queda un manto de duda respecto a la complicidad de la CIA y la empresa de Oliver North en algunas de las operaciones de tráfico de armas y drogas que acaecieron bajo la dictadura de Augusto Pinochet.
En agosto de 1991, el columnista del Washington Post, Jack Anderson, vinculó la muerte de Jonathan Moyle con la de Danny Casolaro, un reportero independiente de 44 años que investigó el Irán-Contras, las cuentas del BCCI y la piratería de un software de espionaje llamado PROMIS. Según Anderson, Moyle investigaba una arista del caso indagado por Casolaro, relativa a la venta de armas y el PROMIS a Irak por parte del empresario chileno Carlos Cardoen, quien trabajó como intermediario comercial de la CIA a inicios de los ochenta.
Otra conexión entre Oliver North y las operaciones ilícitas del régimen militar, dice relación con que uno de los aviones usados en el tráfico de armas de Pinochet – empleados además para el tráfico de drogas, según Baramdyka – fue usado por North en uno de sus viajes a Teherán, justamente para estrechar relaciones con los ayatolás iraníes en el marco de la liberación de rehenes. El susodicho Boeing 707 de la Quinn Freight Limited partió de Santiago el 27 de junio de 1986, cargado con “bombas avispa” para Irán.
Los antecedentes ya mencionados comprobarían que Chile recibió apoyo de la CIA para sus operaciones de tráfico de armas y drogas hacia el exterior.
En 2000, diez años después de la llegada de la democracia, el diario británico The Guardian publicó lo siguiente: “El Ejército y la policía secreta chilenos han pasado más de dos décadas, en secreto, inundando Europa y EEUU con enormes envíos de cocaína. El tráfico comenzó durante la dictadura de 17 años del general Augusto Pinochet y continúa hasta el día de hoy, según ha establecido una investigación de un año de The Observer”.
La complicidad de la PDI, Carabineros, las Fuerzas Armadas y el Ministerio del Interior en el tráfico denunciado por el ex inspector Fernando Ulloa, sumado al silencio generalizado de los medios de comunicación, bien podría tener su explicación en que el tráfico anteriormente descrito nunca terminó.

Sobre las acusaciones
http://www.pnews.cl/2012/10/27/otro-montaje-contra-pato-mery/#comment-14788

Video de Patricio Mery entregando la información del cartel narco de la CIA

http://www.youtube.com/watch?v=QFhem4EBrZc&feature=player_embedded

Ex inspector Ulloa de la PDI acusa al Ministro Hinzzpeter por su participación en red de trafico de drogas. 

http://www.factorabsoluto.cl/video-ex-pdi-denuncia-a-hinzpeter-de-proteger-una-red-de-narcotrafico#.UJbEyLFmI08

Entrevista a Norma Silva, mujer de la resistencia y última casa de seguridad de Bautista Van Schouwen y Edgardo Enríquez



La siguiente entrevista fue concedida por una compañera de cordial sonrisa y voluntad. Como equipo no quisimos testimoniar a la mujer que cuidaba al bauchi, adelantando el testimonio que vamos a presentar, sino que quisimos ver a través de ella, de su cotidianeidad, la responsabilidad que había adquirido, pues no es esta mujer, sino que fueron y son muchas las compañeras que arriesgaron su vida por algún compañero o compañera que era necesario mantener en casas de seguridad. La compañera Norma Silva I. es una más de estas mujeres de retaguardia como la hemos querido bautizar, que en su trabajo se encontró conviviendo con dos de los máximos referentes políticos de la izquierda revolucionaria chilena como fue Bautista Van Schouwen y Edgardo Enríquez E, hermano de Miguel, secretario general del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) de Chile.
Sin ánimos de retrasar esto, presentamos para todos los lectores y las lectoras del blog: el-rojinegro, a la compañera Norma para que relate su panorama. Como última aclaración pedimos comprensión en algunos temas, pues la entrevista fue con el envío de preguntas a Francia, donde reside actualmente la compañera y ella nos respondió de la misma manera hacía Chile. 

Por El Rojinegro

¿Cómo conoció el MIR y cuál era su relación y participación (si es que hubiese) en la organización?

Conocí el MIR como todo Chile lo conoció: por la prensa, revistas, radio y tv que habían en esa época y me alegré que jóvenes que parecían serios, inteligentes y capaces,  plantearan una instancia más avanzada en ese tiempo. En principio no tuve ninguna participación en esa nueva organización, pero algún tiempo después se integró mi hermano que en ese tiempo estudiaba Sociología en el pedagógico de la Universidad de Chile en Santiago.

¿Cómo vive en lo particular, el periodo de acumulación de fuerza revolucionaria (1968-1973)? ¿Dónde desarrolla su vida social y política, en qué consistía esta?

En esos años 1968 al 70 soy militante del Partido Comunista chileno, después de la derrota de Salvador Allende, por segunda vez soy casada con un militante comunista y tengo 4 hijos, soy una joven mujer activa y también interesada en lo que pasa en Chile y en el mundo…

¿En qué contexto y momento conoce a Bautista?

Son años de cambios en el mundo. Nos estremece lo que pasa en el mundo, la Revolución de los estudiantes en Francia y más aún los efectos de la Revolución Cubana y su ejemplo en el mundo, entonces descubrimos que existe otra alternativa posible, además son jóvenes audaces que desafían lo establecido. Es en ese contexto y momento que conozco a Bautista y al resto del Comité Central por una casualidad. Ellos tenían una casa de reuniones en Ñuñoa y se dieron cuenta que estaba vigilada, era 1969 y ellos eran clandestinos; hablamos del gobierno de Eduardo Frei Montalva, entonces recurrieron a mi hermano que vivía con mis padres en una casa cercana a la mía, pero desgraciadamente no pudo prestársela por tener unas visitas y llegó a plantearme el problema. Entonces yo acepté, creo que eran seis o siete compañeros; fue una tarde, yo creo que era primavera. Mi hermano los comenzó a traer de a poco. Yo me puse a regar el jardín y estuvieron dos o tres horas conversando y se fueron yendo de la misma manera, quedándose dos para darme las gracias. Esos dos eran Miguel y Bautista. Reconocí a Miguel porque lo había visto por la tv, pero no conocía al otro. Me lo dijo después mi hermano: “era Bautista”. Tuve una emoción inmensa en conocerlos y los encontré maravillosos a los dos. Conocí otros dirigentes en el curso del tiempo: Edgardo Enríquez, el Gato Valenzuela, la Dra. Matamala y varios que conocí solo con sus chapas.

¿Qué rol era asignado dentro de la organización para con la mujer? 

No podría contestarte la pregunta sobre el rol de la mujer porque conocí muy poco. Sólo sé lo que tuve que compartir con la Dra. Matamala y que creo era de gran importancia y ella una mujer extraordinariamente valiosa.

¿Cómo vivió el 11 de septiembre de 1973?

El 11 de Septiembre Jorge (Jorge era la chapa del Bauchi) estaba en casa. Estuvimos conversando la noche anterior hasta tarde y ellos ya tenían informaciones que el Golpe estaba en la puerta. El había dejado en la radio un discurso grabado que tendría que oírse el 11 a las 7 de la mañana y me lo dijo. Me pasó su radio y me la dejó sintonizada donde hablaría, sólo tenía que prender la radio. Al día siguiente (11/09) sonó el despertador como 10 minutos antes y yo desperté a mis hijos que iban al colegio a las siete en punto; la radio, nada. No quise cambiarla, la llevé y se la pasé: "no hay radio” le dije; él me miró intrigado y empezó a cambiarla, mientras lo hacía murmuraba "este es el día del golpe". Se duchó rápido, se tomo un café y me ofreció llevar a mis hijos al colegio y se fueron. Quedó solamente mi hija menor, pues no tenía clases temprano. No volvería a ver a Jorge hasta después de las fiestas Patrias que no hubieron porque debían sacar los cadáveres de las calles adyacentes a la Moneda.

¿Cómo se llega a ser casa de seguridad del MIR?

Cuando me plantearon la posibilidad de ser casa de seguridad para dos compañeros no sabía quién vendría. Llegaron tarde y eso me lo habían avisado, pero entraron, se acostaron y durmieron y yo solo los vería al otro día. Llegarían obedeciendo un plano que yo les mandé, no había nombre de calle ni numero en las puertas, la reja exterior y la entrada estaban con candado, pero se podía abrir sin llaves. Eran dos, Jorge y Simón y permanecieron el 72 y 73, casi dos años.

¿Cuándo y cómo se gesta el plan de seguridad del MIR? si es que no tiene mayor antecedente, entréguenos su mirada y evalúe este plan de contingencia viendo aciertos y errores.

No conocí nunca ningún plan de Seguridad para ese día. Pero si existían muchas reglas a respetar. Se vivía diferente, pero tratando de dar una normalidad aparente. Ellos en eso eran escrupulosos, ellos tenían sus reglas como llegar a las horas,  el otro trabajo era el mío: chequear el vecindario, notar algo raro, alguien extraño que pasara. Creo que tuvimos para ellos y ellos para nosotros solo aciertos, dos o tres errores fueron míos que debíamos solucionar de inmediato. No supe nunca que habría un Plan y esto era parte de la Seguridad: yo no sabía nada, "Mi deber era ser sorda, ciega y muda”.

¿Cómo era el día a día con el Bauchi en la casa?

Me levantaba a recibirlos de amanecida. Llegaban agotados, cansados y hambrientos. El desabastecimiento crecía y estuvimos pobres, pero su moral no bajaba y Simón que era el que hablaba más y bromeaba más me decía: "les vamos a volar la raja compañera". Puede ser que estuvieran preparando algo, pero de todas maneras no habríamos ganado, éramos David contra Goliat.

¿Pensaba que la dictadura podía ser derrotada en lo pronto?

Nunca pensé que la Dictadura seria corta, por el contrario de lo que pensaba Jorge, que decía que las denuncias y reclamos a las organizaciones Internacionales cambiarían las cosas. No pasó nada y se los dije a los dos después de la Caravana de la Muerte, donde mataron a mi hermano y  a un primo de él en el sur. Lo terrible estaba empezando. Siempre pensé que la Dictadura duraría mucho, pero nunca pensé todas las atrocidades cometidas y que en 40 años no se ha hecho justicia aún. Pienso en la Constitución que dejó. Pienso en el sistema de vida de Chile y me avergüenzo, pienso en los valores morales que ya no existen. Pienso en los sueños de Bautista, en los proyectos de Edgardo, pienso en Miguel, pienso en Chile sin el cobre y sus riquezas naturales, pienso en el mar privatizado, pienso en pascua lama, pienso en ustedes, los trabajadores y los estudiantes y la esperanza abierta.

¿Cuál es su opinión de: “el MIR no se asila”, que le comentaba Bautista al respecto, le aconsejó usted alguna vez el exilio?

Creo que si lo hubieras preguntado antes te diría que me costó casi cuarenta años comprender la decisión de “el MIR no se asila” y aceptarla. Tenia que perderlo todo: mi hermano, las torturas de mi hijo a los 16 años y su vida quebrada, la pérdida del Bauchi, de Miguel y Edgardo, los compañeros que siguieron, comunistas extraordinarios, socialistas, miristas y los heroicos muchachos del Frente, las acciones heroicas de todos los militantes, simpatizantes de la resistencia, gente del pueblo, obreros, pobladores, feriantes, las mujeres que sacábamos balas en los puestos médicos clandestinos, las que vimos morir a los niños, a los hombres, a las guaguas en las poblaciones, los que pudimos hacer en el 86 la revolución en Chile y nos vendieron y nos traicionaron y aquí estamos, en el mismo punto con un sistema corrupto con más de veinte años perdidos y no solo los años, tú lo sabes. Te digo todo esto porque aquí está el “NO” del MIR. Debimos permanecer y la mayoría así lo hizo y murieron. Es lo único que es limpio, transparente como Bautista. Hoy se pueden abrir las banderas rojinegras con orgullo y decir: “nos quedamos, estuvimos con el pueblo que humillaron y no nos escondimos en embajadas”. Tenía razón Bautista, compañero. Yo le dije muchas veces que se asilara, se lo rogué, le lloré que lo hiciera y me decía: “Por qué no asilas a tu hijo" que tenía 14 años y era del FER, pero no era lo mismo le decía, y él me contestaba "mi vida vale tanto como la de él”. Deje de pedírselo, pero han pasado los años. Tuve que salir de Chile porque me fueron a detener y me arranqué. Me vine. Sabía demasiado. Huí porque era madre y sabía que me podían hacer hablar. Me arranqué por mis hijos y el riesgo de denunciar a otros que eran necesarios en la lucha.

¿Quién, cuándo y cómo se decide la salida del Bauchi de su casa?

La salida de la casa la decide él porque tiene cólicos  renales y es preciso extraerle cálculos de forma urgente, la semana antes de su caída. Vuelve a casa el 11 de Diciembre con pinta nueva, camisas y ropa interior de verano. Me dice que volverá el sábado, a más tardar el domingo. No puedo creerlo. Nunca se ha alejado tanto y tengo miedo. Me dice que a la parte que va es segura, impecable. Le pregunto si es una embajada. No, no es una embajada responde. No conozco otra parte que pueda ser más segura. El jueves 13 moriría. 

¿Cuándo y cómo se entera de su detención? ¿Piensa que Bautista habría tenido otra suerte de no haber salido de la casa de seguridad?

Ese mismo jueves me llama el compañero que se lo llevó de la casa y me pregunta: "está por ahí el amigo". Yo le contesto que no y le pregunto que qué pasa. Te llamaré cuando lo ubique me responde. El sábado 15 se teme una hospitalización (caída). El domingo 16 tenemos confirmación. Y pienso que Bautista no habría caído entonces, de haber permanecido en mi casa, pero si habría caído un día. Había logrado arrancar a tiempo en dos oportunidades, no de mi casa sino de dos lugares de reunión.

¿Usted en lo personal, como vivió los años siguientes?

Me preguntas como viví los años siguientes. No lo creerás pero viví luchando .Yo no he sido nunca mirista, pero luché con ellos. Cuando ya casi se extinguía la fuerza central, golpe tras golpe, volví a mi partido y combatí con ellos. Me dieron la responsabilidad de trabajar con la dirección del frente y lo hice. Fue la época de mi reencuentro con los que había perdido años antes. La misma pureza, la misma entrega. Fue entonces que termina mi lucha y salgo en enero 1987. Llegamos a un foyer de emigrados con mi hijo. Un día llega con un diario y veo la matanza de corpus christi y la foto de mis hijos, así yo los llamaba. Me tuve que emborrachar para después aprender a vivir de nuevo. Meses después matarían a mi comandante José Miguel y Tamara.

¿Siente que están un tanto olvidadas las “mujeres de la retaguardia”, en una sombra que ellas mismas eligieron para mantener las casas de seguridad, servir de correo, enlace. Etc.?

Los partidos políticos de la izquierda tradicional olvidaron al pueblo y por supuesto a las mujeres. Nosotras fuimos una legión de mujeres que expusieron su vida, la de sus hijos, para que la Resistencia chilena existiera. Ellas fueron el pilar que la sostuvo. Permitió que los compañeros se reunieran, conversaran. Los trabajos de solidaridad eran responsabilidad nuestra desde los primeros días en los estadios, centros de detenidos. La solidaridad femenina durante la Dictadura no ha sido reconocida por nadie y hay miles y miles de mujeres que merecerían o merecen un apretón de manos, un gracias por salvar vidas, por abrir las puertas a un compañero perseguido.

Alguna experiencia particular, anécdota que nos quisiera contar.

Voy a contarte como era la vida con el Bauchi y Edgardo. Antes del Golpe ambos se levantaban muy temprano, invierno y verano. Yo me acostumbré a tomar desayuno con ellos. Trataba de tenerles siempre su juguito de naranjas o pomelos, su café muy cargado y harto pancito, cuando se podía con mantequilla o margarina y una tajadita de chancho, dos o tres veces por semana se comían dos huevos, eran muy hambrientos. No llegaban en todo el día. Generalmente volvían los dos juntos y usaban dos autos pequeños: una citroneta blanca y un austin mini rojo. A veces me decían que andaban todo el día con el desayuno y que a medio día generalmente comían un sándwich. Yo guardaba la mitad del almuerzo para la noche, como algo de sopita, un poco de arroz, porotos o lentejas que devoraban con pasión. Eso sí que nunca les falto una fruta, su termo con te. Siempre conversábamos a la hora que llegaran de los acontecimientos generales y yo les contaba de mi participación en los centros de madres,  JAP y otros. Nos hicimos amigos pronto. Al mes ellos estaban acostumbrados. Fuera la hora que fuera Bautista leía. Tenía siempre tres libros para leer, uno de consulta, otro en ingles de algún autor famoso y otro chileno o latinoamericano y su música infalible: sus casettes con música clásica. El era un hombre adorable, gentil, delicado, hermoso. No hablaba mucho, pero si diría que siempre estaba pensando. Cuando no salía se ponía atrás, que era el living, acostado sobre una alfombra para leer. Pero cuando tenía que escribir era otra cosa. Escribía y después entraba en la cocina a leerme lo que escribía. Me leía cosas lindas y profundas sobre las relaciones humanas, sobre el Hombre y la búsqueda de Libertad, temas humanos siempre. Estudiaba, leía, consultaba y jugábamos ajedrez y damas donde yo era campeona de damas y le gané solo una vez al ajedrez. Edgardo era más hosco, más ruidoso, más extrovertido. Tenía una voz profunda, era barítono y de repente nos poníamos a cantar los tres, "volver", ese tango increíble que nunca más lo pude oír sin ponerme a llorar a mares. El se fue de la casa los primeros días de diciembre, le pregunte a Bautista que pasaba y me dijo: "tiene algo que hacer" y no insistí, pero un día que el bauchi no estaba sentí un ruido de moto y venia Edgardo entrando en moto, parecía un adolescente con blue jeans y una polera rayada, le habían encrespado el pelo, se veía diferente. Llegó con la moto hasta mí. Me dijo si podía recorrer la casa, cuando entré lo vi mirando por una ventana con lagrimas en los ojos, no dije nada. Me pidió las fotos que le había guardado y yo había embarretinado en una caja, eran fotos de su familia, me pidió que lo fuera a dejar a la moto. Antes de subir me abrazó muy largo diciéndome: eres grandiosa mujer, eres grandiosa, estaba llorando. Comprendí que se iba y que no lo vería más. Se subió a la moto y volvió, tenía la cara mojada y me seguía gritando: mujer eres grandiosa. Es lo último que tengo de él. El último hermoso y triste recuerdo es cuando dijeron que lo habían matado y que habían mandado un dedo para reconocerlo, lloré varios días. Me cuesta recordar todo esto, pero el doctor dice que hace bien recordar, que tengo que sacarme la carga que llevo durante casi 40 años con mis muertos.

El Bauchi hoy, ¿Cómo se lo imagina? ¿En qué estaría?

Ahora recordar, suponer, decir, creer, inventar que es lo que pensaría, como saldría Bautista de todo esto, sólo les diría lo que me dijo cerca del 20 de septiembre aproximadamente cuando volvió a su casa, a nuestra casa: "aquí lo único que hay que hacer es unirnos, unidad antifascista, aquí ahora somos todos compañeros". Me asombré de su voz, de su acento. Me fui acercando a él tímidamente porque de tal manera llegó su grito que le dije: ¿qué puedo hacer ahora yo compañero? Seguir luchando como lo has hecho hasta ahora, seguir luchando, me respondió. Nunca lo he olvidado ningún día, ni un instante de mi vida. Tu sabias lo que estaba pensando cuando te fuiste para siempre y evitaste mirarme. Hiciste la elección perfecta, TRASCENDISTE A LA HISTORIA.

Que mensaje les quiere dejar a las nuevas generaciones que hoy retoman y continúan con el proyecto revolucionario en Chile.

Quisiera modestamente representar a las Mujeres chilenas que nunca abandonaron la Patria y a las que hemos conocido el exilio forzado en diferentes lugares del mundo y que constituimos durante 17 años la Resistencia y la Retaguardia en la lucha contra la Dictadura para mandar un mensaje de esperanza y fuerza a las Nuevas Generaciones que hoy renacen y toman en sus manos y en sus corazones la continuación del Proyecto Revolucionario inconcluso en nuestra Patria. El Proyecto de Edgardo, del Bauchi, de Miguel, de las luchadoras y los luchadores. Creemos que ese legado les corresponde a ustedes los jóvenes chilenos, estudiantes o trabajadores, cesantes o marginados de un sistema cruel e injusto y es deber continuarlo y seguir impulsándolo. "La Historia es nuestra y la hacen los pueblos" dijo nuestro Presidente Salvador Allende. Esta historia les pertenece a ustedes porque son jóvenes y luchadores, porque no olvidan y porque son lo mejor de nuestra patria. Con todo mi cariño y con todo nuestro cariño: Las mujeres de la Retaguardia chilena.

Bautista Van Schouwen.

Edgardo “pollo” Enriquez y el Bauchi.

viernes, 2 de noviembre de 2012

El MIR y el campamento Nueva Habana: el desarrollo del partido y del poder popular.

La necesidad del instrumento (partido) y la necesidad de desarrollar el poder popular.

En momentos donde la crisis de representatividad, aquella que pone en entredicho la legalidad y legitimidad de los representantes (clase política), en contraposición con los profundos malestares de los representados. Vale la pena preguntarnos si existen alternativas y/o experiencias que puedan educar la memoria y experiencia popular, en cuanto a la autogestión y democracia directa, participativa y de un profundo sentir comunitario. Allí la experiencia del Campamento Nueva La Habana, aparece desde la profunda llanura social para entregarnos la voz de quienes a punta de sueños, organización y proyecto político construyeron un interesante relato colectivo en la larga historia del poder popular en Chile.

(extraído de "el irreverente")
Desde ese estorbo llamado memoria… un poco de historia
Con la autogestión como eje en la construcción comunitaria y colectiva, nació, el 1 de noviembre de 1970, el campamento Nueva Habana. Producto de la llegada de 1.500 familias provenientes de los campamentos Ranquil, Magaly Honorato y Elmo Catalán al oriente de la rotonda Quilín. La presencia del MIR en el campamento mancomunó las condiciones humanas y voluntades políticas que permitieran diseñar los espacios físicos y sociales de una comunidad. En síntesis, construir barrio desde las necesidades, capacidades y convicciones de los sujetos.

Alejados del modelo peticionista que imponía el antiguo estado de bienestar, los pobladores de Nueva La Habana construyeron su proyecto desde la autogestión. Para ello se dotaron de una organización a través de 26 comités de manzanas. Existía el directorio que representaba el parlamento popular, donde la participación era prácticamente completa, también estaba la jefatura compuesta por 5 miembros. Estas orgánicas regulaban el buen funcionamiento de los Frentes que se formaron al interior de la población, donde todos cumplían una función esencial. Por ejemplo, estaba el “Frente de salud”, compuesto por un policlínico, y una sala de recuperación en su interior. El “Frente Cultural”, donde estaban los Subfrentes como el deportivo, el de teatro, el de educación, etc.

La educación era considerada muy importante y para esto se dispusieron en un principio las sedes de las manzanas como salas de clases, posteriormente un grupo de profesores recién egresados se acercaron a la “pobla” para ofrecer sus servicios, de esta manera se crearon las salas de clases al interior de buses reciclados.
Surgían entonces diversos Frentes, las acciones culturales se volvían numerosas, periódicos, teatro, prensa, áreas verdes, murales. Los comedores populares fueron símbolo de la unión de los pobladores.

Transcurría el tiempo, y pequeñas generaciones observaban a sus padres, hermanos, vecinos, construyendo una población organizada, autónoma. El proceso era colectivo, donde destacaban los liderazgos naturales de la población. Entre ellos, Alejandro “Mickey” Villalobos. Pero reducir a la figura de una sola persona la gesta colectiva de Nueva La Habana, es apostar a la mezquindad del verdadero reconocimiento. Visto con la perspectiva de los casi 42 años de su creación, dirigentes de la envergadura de Villalobos; son consecuencia, significante y síntesis de 1.500 familias organizadas de manera autónoma y autogestionada para constituir una comunidad.

El territorio reescrito
Llegó 1973 y la población Nueva Habana pasó a ser Nuevo Amanecer. No sólo desaparecieron los dirigentes de la organización, sino también los espacios que constituían otra manera de vivir el territorio, desmantelando la arquitectura social del campamento.

Con la represión instalada el día 11 de septiembre y ya teniendo en conocimiento del salvajismo con que las Fuerzas Armadas arremetieron contra el movimiento popular y los revolucionarios. Con toda esta presión amenazadora, era del todo recomendable que el jefe de Campamento y los militantes de partidos populares que tuvieran más connotación, deberían salir del lugar para un mayor resguardo de sus vidas. Es así como el Mickey llama a una asamblea general al día miércoles 12 y le manifiesta a los pobladores que ya nada se puede hacer y que por seguridad propia y del resto de la población ha tomado la decisión de retirarse del campamento.

A la partida de los dirigentes más connotados, sigue la detención de quienes le sucedieron (1). Ocurriendo todo durante la primera quincena golpista y asegurado el descabezamiento orgánico se hace presente un oficial de ejército y nombra por decreto una nueva directiva, manteniendo la estructura orgánica tal como era antes, pero con cambio de nombre para la población. En 24 horas fueron los nuevos dirigentes los encargados de hacer una terna desde la cual surgió el nombre de la unidad poblacional cumpliendo así con las órdenes dadas por el oficial, denominando al Campamento Nueva La Habana como, Campamento Nuevo Amanecer.

Sin estorbar… la memoria como arma

Han transcurrido 42 años de la fundación de Nueva La Habana. Lo transcurrido entre noviembre de 1970 y septiembre de 1973, parecen componer la sinfonía de utopía y ensayos revolucionarios desde la llanura social. No desde la élite. El relato deja manifiesto que mientras la vía institucional al socialismo enarbolada por la Unidad Popular al poco andar mostraba fisuras que la obligaban en burocratizar o gradualizar su propuesta de cambio social. La vía social o popular al socialismo que fue construida en los límites de la legalidad y amparada en la legitimidad de la organización, demanda y la autonomía del sujeto organizado para la consolidación del proyecto. Y esta implementación e instalación se manifestó por la construcción de organizaciones participativas, deliberativas, democráticas y movilizadoras de un sujeto que existió en la medida que lo individual daba paso a lo colectivo. Y esa condición: la del ser social se mantiene en cada rincón de la Nueva La Habana. Una vez más: los muertos, las organizaciones y las ideas que trataron de hacer desaparecer… aún gozan de buena salud.


(1) Jaime Jiménez, J. Carlos Ávila, José Rodríguez, Luis Espinoza, Waldemar Monsálvez, Alejandro Villalobos. Lista de muertos y desaparecidos entre 1973 – 1975. Todos pobladores de Nueva La Habana.